En todo el mundo, se estima que al menos 2,4 mil millones de personas sufren de caries no tratadas en su dentición definitiva. En los niños, la caries es una de las enfermedades crónicas más comunes, con aproximadamente el 60-90% de ellos afectados a nivel mundial.
Parece ser que la falta de higiene dental adecuada, el consumo excesivo de azúcares y la falta de acceso a la atención dental son factores clave que contribuyen al desarrollo de caries. Pueden provocar dolor intenso, infecciones graves, dificultades para comer y hablar, e incluso pueden afectar la autoestima de las personas.
La prevención es clave para combatir las caries. Hablando de niños, recuerda acudir a tu centro de salud y preguntar por los programas de salud bucodental que puedan tener en marcha.
Para reducir estas cifras en pro de promover una buena salud bucodental, podemos seguir estos consejos:
1. Dando ejemplo: los mayores podemos enseñar a nuestros niños sobre la importancia de la higiene dental al demostrar buenos hábitos nosotros mismos, como cepillarse los dientes de manera rutinaria tras las comidas y usar hilo dental.
2. Creando rutina dental: establecer una rutina diaria de cepillado y cuidados dentales ayuda a inculcar hábitos saludables desde una edad temprana. Hacer del cuidado dental una parte regular de la rutina familiar puede prevenir la caries y otras enfermedades bucales.
3. Eligiendo alimentos ricos y saludables: limitar la ingesta de alimentos y bebidas azucaradas, como refrescos, dulces y zumos, puede ayudar a reducir el riesgo de caries. Optar por alimentos saludables, como frutas, verduras y lácteos, fortalece los dientes y promueve una buena salud bucal.
4. Visitando al dentista: programar visitas regulares al dentista para revisiones y otros cuidados es fundamental para detectar y tratar cualquier problema dental a tiempo. Los mayores debemos enseñarles desde pequeños que visitar al dentista es parte importante del cuidado de su salud.
5. Protagonistas menudos en el proceso: permitir que los niños participen en la elección de cepillos de dientes y pasta dental puede hacer que su cuidado sea más divertido y motivador para ellos. Además, explicarles la importancia del cuidado en un lenguaje que puedan entender ayuda a crear conciencia desde edades tempranas.
Desde los centros escolares también hay tarea por hacer, ya que es uno de los espacios donde más tiempo pasan nuestros niños: se pueden crear programas que incluyan educación para la salud mediante talleres y charlas, revisiones de la mano de especialistas. Promover desayunos saludables es algo sobradamente extendido en los centros pero que no debe caer en el olvido y habría que volver a ponerlo en el candelero.
Y como aportación ideal podríamos incluir espacios amigos de la higiene dental: baños limpios y equipados con suministros básicos de cuidado dental, como cepillos de dientes y pasta dental, puede animar a los alumnos a darle un empujoncito al cuidado dental.
En resumen, la educación y la concienciación son las mejores herramientas para combatir la caries dental. Así, podemos crear millones de sonrisas y mejorar la salud oral de las generaciones futuras.
TAMARA JIMÉNEZ CARO
Enfermera escolar y especialista de Pediatría
@tuenfermerainquieta