El polen es el término que agrupa los granos que producen las plantas con semillas, y es esencial para la reproducción de las plantas. Cuando éstas florecen, el polen está presente en el aire, de tal manera que al respirar desencadena para quienes tienen alergia los síntomas típicos, como rinitis, conjuntivitis e incluso crisis asmáticas.
El tratamiento principal de las personas alérgicas al polen consiste en evitar la exposición al mismo. Por este motivo es fundamental conocer los niveles de polen en la atmósfera, así como los periodos de germinación de las plantas. Esta información puede obtenerse a través de la página de la Comunidad de Madrid, en servicios e información de salud, en el apartado especial dedicado al polen. La Red Palinocam ofrece los niveles en el ámbito geográfico de la Comunidad e información detallada sobre los principales tipos de polen que producen la alergia: arizónicas, plátano de paseo, gramíneas y olivo, entre otros.
Desde la consulta de enfermería proponemos algunas acciones que pueden ayudar a prevenir la exposición:
— Mantener la cara y las manos limpias, lavar ojos y nariz con agua frecuentemente.
— Ducha y cambio de ropa al llegar a casa, puesto que el polen se deposita en la ropa y en el pelo.
— Utilizar gafas de sol.
— No abandonar la medicación aunque los síntomas estén controlados. Estos medicamentos pueden producir somnolencia y disminuir la atención, por lo que se debe tener en cuenta a la hora de conducir o realizar actividades que requieran atención.
— Mantener ventanillas cerradas en el coche y evitar desplazamientos en moto o bicicleta.
— Utilizar aspiradora y bayeta húmeda para limpiar el polvo y dormir con las ventanas cerradas en casa.
— Utilizar humidificadores y filtros de polen para el aire acondicionado del domicilio o del coche.
— Tener en cuenta que los días de tormenta y viento aumentan las concentraciones de polen.
Para cualquier duda que tenga sobre la alergia, su tratamiento y las vacunas, no lo dude: le esperamos en el centro de salud.
Miriam Perales Navarro. Residente de enfermería familiar y comunitaria.
