Desde la Delegación de Villaverde de la FAPA Giner de los Ríos repasan la situación al inicio del curso 2019-20
DELEGACIÓN VILLAVERDE FAPA GINER DE LOS RÍOS
La situación en el Distrito en educación es, como en años anteriores, de auténtico abandono por parte de las Administraciones: institutos antiguos con aulas masificadas y principal foco de conflictos, colegios que en época de calor son auténticos hornos y donde las obras que se realizan son parches pero no soluciones, desaparición de profesores de apoyo y de especialistas en atención a alumnos con necesidades especiales, bajas de profesores que no se cubren o se hace muy tarde, institutos con 1.000 alumnos con un solo orientador que nunca va a poder llegar al alumnado y orientadores que se deben dividir entre varios colegios, falta de oferta pública en FP en nuestro distrito, AMPAs que no pueden desarrollar sus actividades y que han perdido toda su importancia en la comunidad educativa gracias a la LOMCE… Son muchos los problemas y poco interés en ponerle solución.
Desde hace años, Villaverde está viviendo una gran ampliación de construcción de viviendas (Butarque, Parque de Ingenieros, zona del Puente Alcocer…) que nos trae nueva población al barrio, pero no equipaciones educativas como colegios o institutos. A día de hoy no hay planificada ninguna nueva construcción en este sentido.
Desde la Delegación llevamos años solicitando la construcción de nuevos centros educativos que amplíen la oferta pública y desmasifiquen los centros que ya existen. También la utilización de los institutos en horario vespertino: no tiene ningún sentido tenerlos masificados por las mañanas y vacíos por la tarde, pudiendo así cubrir esa necesidad de oferta de FP en el barrio.
Otro de los problemas que vivimos los padres con hijos en Secundaria es que, al eliminar la convocatoria de exámenes en septiembre, el curso se ha acortado y acaba en mayo, quedando junio en un mes sin sentido para los que han aprobado todo y que deben ir a los centros aun sabiendo que no se les va a poder ofertar actividades; y para los suspendidos, un mes perdido, porque los centros no están preparados para poderles ayudar a recuperar su suspenso, lo que conlleva que tanto unos como otros se queden en casa o vayan desmotivados sabiendo que deben ir, pero a no hacer nada. Nos consta que los equipos directivos trabajan para evitar esta situación, pero no reciben ningún tipo de ayuda por parte de la Administración para poder planificar este período y atender a estos dos tipos diferentes de alumnado, creando además en las familias un grave problema de conciliación un mes más.
Desgraciadamente, mientras las políticas sigan apoyando la educación privada y concertada, seguiremos sufriendo éstas y más consecuencias de la degradación de la escuela pública, que nosotros, como Delegación de la FAPA Giner de los Ríos, seguiremos defendiendo como hasta ahora.