Normalmente la actividad principal de uso de nuestros móviles en vacaciones es hacer fotos. ¿Qué problemas, principalmente, nos podremos encontrar ante tal uso? Pues cuestiones relacionadas con la capacidad, la copia de las fotografías fuera de nuestro terminal y la batería.
Respecto a la capacidad hay que tener en cuenta antes de empezar nuestras vacaciones limpiar de fotografías y vídeos antiguos —ojo, también del Whatsapp—, y si hay Apps que no se utilizan, también fuera. En según qué dispositivos que no sean de Apple, se pueden utilizar tarjetas de datos, que nos pueden ampliar bastante la capacidad. De todas formas, comprobar que de las fotos y vídeos que aún dejemos tengamos copia de seguridad fuera, pues también es más fácil perder o que te roben el móvil en estas fechas.
Otro tema importante es poder realizar copias de esas fotos sobre la marcha, bien por seguridad, bien por recuperar capacidad. Para ello lo más cómodo y fácil sería utilizar sistemas como Dropbox o Google para, a través de wifi, subir a la nube nuestros recuerdos y tenerlos a buen recaudo, eliminándolos, si es necesario, de nuestro terminal. Los que utilicen tarjetas de datos, pueden sacarlas y copiarlas en un ordenador, o cambiarlas por otras nuevas.
Por último y no menos importante es el gasto de batería. Hoy en día es difícil que un terminal aguante toda una jornada sin “repostar”. Para ello, aparte de los consejos típicos para ahorro de energía (hablar poco, no utilizar mucho según que Apps, etc.), el llevar encima un cargador por si hay ocasión de enchufarlo en algún sitio y también el disponer de una batería externa son opciones muy recomendables.
En fin, aunque se podría profundizar más, estas recomendaciones son las más básicas e importantes. Espero que os sirvan. Feliz verano.