SERVICIO DE PREVENCIÓN Y MEDIACIÓN EN CONFLICTOS DE VILLAVERDE.
El Servicio de Prevención y Mediación de Villaverde organiza por quinto año consecutivo una nueva edición de la iniciativa “Cartas de buenos deseos”. A través de esta iniciativa cualquier vecino interesado en participar puede escribir un mensaje de forma anónima. Las posibilidades son infinitas: puedes escribir una carta, hacer un dibujo, citar una poesía, una canción o una fotografía o imagen que represente un mensaje positivo.
El destinatario será cualquier vecino de Villaverde Alto, y desde el Servicio de Mediación se encargan de hacérselo llegar repartiendo los mensajes entre el 20 y el 23 de diciembre por los buzones del barrio. Si quieres participar, tienes hasta el 16 de diciembre para enviar tu mensaje, vía correo electrónico (mediacionvillaverde@provivienda.org), WhatsApp (687 635 485) o Twitter (@mediacionvillav).
A modo de ejemplo, reproducimos parte de uno de los mensajes de ediciones anteriores; como veréis, muy bonito:
“Cuando me informaron de la posibilidad de dirigirme a ti de forma anónima para escribirte una carta navideña, no pude resistirme. Siempre he pensado que escribir un anónimo a alguien es de cobardes, y quizás yo lo sea un poco, pero la ocasión se me hace doblemente tentadora al pensar que tú a la vez te conviertes para mí en la persona anónima que recibe mi carta, y quizás por ese motivo el acto de cobardía quede anulado.
No sé si te ocurrirá como a mí, que estoy harto de oír que esta Navidad es una Navidad especial, que es diferente a la de otros años, y efectivamente creo que así va a ser. […]
Hay que exprimir hasta la última gota positiva de todo lo malo, siempre sale algo, y este año hemos tenido mucho malo, con lo cual tenemos mucho de donde exprimir, y me gustaría extender este anónimo que comparto contigo a todo el mundo para animarles a que dejemos de ser cobardes y que nos digamos clara y abiertamente las cosas a la cara, pero que también nos digamos dos palabras, esas dos palabras que nos cuesta una barbaridad pronunciar, que nos las dejamos ahí dentro quemándonos el pecho y no somos capaces de decírselas a la personas que tenemos enfrente, metiéndonos cada noche en la cama arrepentidos de nuestra cobardía. Deja un momento para leer la carta… Sí, para; luego sigues… Busca un espejo donde estés a solas y suelta esas dos palabras mirándote a los ojos. […]
P.D.: Por favor, guarda en tu baúl imaginario, antes de que se llene, un abrazo muy fuerte para mí. Quién sabe, quizás algún día nos encontremos.”
¡Anímate a participar en esta bonita iniciativa!