Hemos vuelto del verano cargados de fotografías con los recuerdos de unas vacaciones ya lejanas. Ahora deberíamos repasarlas y eliminar aquellas que no pasen el filtro correspondiente, pero todos sabemos que, por regla general, se van a quedar todas. También nos deberíamos plantear la necesidad de preservar copias de esas imágenes que hemos capturado, pero… ¿lo hacemos? Normalmente tendemos a dejar las fotografías en nuestro dispositivo móvil (por si las tenemos que enseñar) y a no ser que nos quedemos sin espacio no hacemos limpieza o las sacamos fuera.
Por ello es necesario hablar de esa tarea, casi siempre, olvidada: la copia de seguridad. En este caso lo hacemos para preservar las fotografías de nuestras vacaciones, pero sirve para cualquier información digital que tengamos en nuestros dispositivos móviles (teléfonos, tabletas…) o en nuestros ordenadores.
La importancia de realizar copias de seguridad radica en la vulnerabilidad inherente a los sistemas digitales. Sin una copia de seguridad, podríamos perder documentos importantes, fotos, vídeos, correos electrónicos y otros datos valiosos, lo que podría tener consecuencias graves tanto a nivel personal como profesional.
Además, la ciberseguridad es otro factor crucial que subraya la importancia de las copias de seguridad. Los ataques de ransomware, por ejemplo, que encriptan los archivos y exigen un rescate para su liberación, se han vuelto cada vez más comunes. Tener copias de seguridad actualizadas permite restaurar los sistemas sin tener que ceder ante las demandas de los atacantes, lo que no solo protege la información, sino también los recursos económicos.
Existen diversas formas y lugares para realizar copias de seguridad. Los métodos más comunes incluyen:
1. Dispositivos de almacenamiento externo: Los discos duros externos, memorias USB y otros dispositivos físicos permiten hacer copias de seguridad de manera local. Son fáciles de usar y proporcionan un control total sobre los datos, aunque son vulnerables a fallos físicos y robos.
2. Copias de seguridad en la nube: Servicios como Google Drive, Dropbox o OneDrive ofrecen almacenamiento en la nube, lo que significa que los datos se almacenan en servidores remotos. Esta opción ofrece una alta disponibilidad y accesibilidad desde cualquier lugar, además de protección contra fallos locales y desastres naturales.
3. Aplicaciones de copias de seguridad: Existen programas especializados que automatizan el proceso de copia de seguridad, asegurando que los datos se respalden regularmente y reduciendo el riesgo de olvidar realizar una copia.