¿Te has preguntado alguna vez
cuántos personajes viven en ti
habitando en tu forma de ser
y haciendo que seas así?
A un lado, el altruista,
siempre lleno de bondad.
Al otro, el egoísta,
que carece de caridad.
El de la cabeza bien amueblada
o el eterno inmaduro;
el que vive en épocas pasadas
o el que visualiza el futuro.
El que siempre está indeciso
o el valiente y atrevido;
el que dice lo preciso
o el que nunca está convencido.
Pues todas esas personalidades
habitan en tu interior.
No creas en las casualidades
cuando te preguntes “¿Quién soy yo?”



