JUAN JOSÉ CARVAJAL ESPIGARES.
Nunca dejes que una equivocación
te deje el alma sin ganas,
pues no hay cosa más humana
que cometer un error.
No es cuestión de inteligencia
ni de estudios superiores,
pues no hay mejores ni peores,
sino una lección de indulgencia
para poder llegar a entender
que hay cosas que corregir
pero que también de ti
tienes mucho que aprender.
Y dejar claro el mensaje:
que no hay mejor enseñanza
que el valor de la esperanza
Por largo que sea el viaje
Apréndete bien la lección
que habla de tus defectos:
no es cuestión de ser perfectos,
sino cada día un poco mejor