LUIS MARIANO GUILLÉN PARRA.
Ante las supuestas “mejoras” que se están haciendo en toda la zona de la calle Lezo, Escoriaza, Anoeta, Arechavaleta, Alcocer y demás, me veo obligado a exponer mis más enérgicas quejas. Primero de todo, quisiera saber qué tipo de estudio y quién lo ha hecho, respecto a las supuestas mejoras en el barrio, ya que sobre todo por parte de aparcamientos de los vehículos que hay en esta zona se han visto reducidos en más de un 40%. Eso sí, se han hecho unas aceras de más de 5 metros de anchura. Quisiera saber quién ha sido la mente privilegiada que ha diseñado un proyecto de mejora de un barrio cuando en casi todas las calles en las que se podía aparcar en los dos laterales se ha reducido a un solo lateral para aparcar, y poniendo las farolas fuera de la calzada quitando aún más aparcamientos. Hace 40 años, cada vecino disponía de un solo coche por vivienda. Hoy en día hay entre tres y cuatro. ¿Dónde aparcamos? Aparte de que llevamos más de ocho meses de incómodas obras que parece que no tienen fin. Quien haya diseñado esta desafortunada mejora evidentemente no vive en la zona. Es inadmisible que se hayan dejado espacios para aparcar donde cabrían dos coches y medio, porque dos caben de sobra y tres no caben. Aparte de haber dejado todos los cubos de basura ocupando los espacios de aparcamiento en lugar de hacer recogidas de basura soterradas.
Las obras realizadas forman parte de un proyecto de regeneración urbana diseñado por equipos técnicos para mejorar la accesibilidad y la calidad del espacio público. Entendemos que la reducción de aparcamientos puede generar inconvenientes, por lo que trasladaremos su inquietud a las áreas responsables para estudiar posibles medidas complementarias.
Respecto a los cubos de basura, revisaremos alternativas para optimizar su ubicación en futuros proyectos. Lamentamos las molestias ocasionadas por la duración de las obras y agradecemos su paciencia mientras trabajamos por un barrio más accesible y sostenible.