Carlos Gómez Cacho
Ya no podemos concebir nuestras vacaciones sin nuestros dispositivos móviles, especialmente nuestro teléfono, que utilizamos como cámara de fotos, para guiarnos con el GPS, información turística, reservas, etc. ¿Qué problemas nos podremos encontrar con el móvil? Pues principalmente cuestiones relacionadas con la capacidad, la copia de las fotografías fuera de nuestro terminal y la batería.
Respecto a la capacidad, antes de empezar nuestras vacaciones deberíamos limpiar las fotografías y vídeos antiguos; ojo, también del Whatsapp; y si hay apps que no se utilizan, también eliminarlas. En según qué dispositivos que no sean de Apple, se pueden utilizar tarjetas de datos que nos pueden ampliar bastante la capacidad. De todas formas, debemos comprobar que de las fotos y vídeos que aún dejemos tengamos copia de seguridad fuera, pues también es más fácil perder o que te roben el móvil en estas fechas.
Otro tema importante es poder realizar copias de esas fotos sobre la marcha, bien por seguridad, bien por recuperar capacidad. Para ello lo más cómodo y fácil sería utilizar sistemas como Dropbox, Google Fotos o iCloud para, a través de wifi, subir a la Nube nuestros recuerdos y tenerlos a buen recaudo, eliminándolos si es necesario de nuestro terminal. Los que utilicen tarjetas de datos pueden sacarlas y copiarlas en un ordenador, o cambiarlas por otras nuevas.
Por último, no menos importante es el gasto de batería, y que nos dure todo el día. Hoy en día es difícil que un terminal aguante toda una jornada sin “repostar”. Para ello, aparte de los consejos típicos para ahorro de energía (hablar poco, no utilizar mucho según que apps, apagar la pantalla enseguida, desconectar el wifi, bluetooth, etc.), llevar encima un cargador por si hay ocasión de enchufarlo en algún sitio y también disponer de una batería externa son opciones muy recomendables. Y como seguridad es conveniente tener activadas las funciones para poder encontrar el móvil y, en su caso, poder eliminar todo su contenido.